Escritor

Joaquín Carbonell nació lector. Bueno, no es tan cierto, pero casi. El primer libro que recuerda haber leído es Corazón, de Edmundo D’Amicis, ejemplar que le regaló su padre a la edad de seis o siete años y que, al igual que ha ocurrido con miles de niños de otras latitudes, logró impactarle. Esta historia de los Apeninos a los Andes, que más tarde vimos encarnada en la TV por Marco, fue libro de iniciación de Joaquín. A partir de ahí leyó todo cuanto caía en sus manos, que no era mucho. Leer en un pueblo no sólo es una proeza, es un detalle de mal gusto, similar al efecto que causaba Jorge Valdano en su entrenador Amancio. Joaquín leía tebeos especialmente. Tebeos de Roberto Alcázar y Pedrín, de El Coyote, El Jabato, El Cachorro (¡cielos qué ciclo!), tebeos de Superman, tebeos de El TBO, en fin, miles de tebeos. Detrás de un niño lector de tebeos (es tan feo eso de cómics) hay un gran lector. De novela, de poesía, de tebeos. Y a veces un escritor.

Joaquín Carbonell (fotografía por Judith Prat)

Desde todos los ángulos posibles (poesía, biografía, novela y ensayo), ha cultivado la faceta de escritor. Dejando para otro apartado sus miles de artículos y colaboraciones como periodista, en 1987 se inició como poeta. Misas separadas (1987) y Laderas de ternero (1994) pertenecen a este género.

Tres títulos figuran en el apartado de biografías: El Pastor de Andorra, 90 años de jota (biografía de José Iranzo, 2005), Pongamos que hablo de Joaquín, una mirada personal sobre Sabina (2011), y Querido Labordeta (2012). Dos de ellas, la de El Pastor de Andorra y la de Labordeta, han dado lugar a sendos documentales sobre dichos personajes.

En tan sólo cinco años y en colaboración con Roberto Miranda, vieron la luz cuatro libros dedicados a Aragón. Juntos escribieron Proyecto de Estatuto de Aragón, plan B (2007), Gran Encicopledia de Aragón preta, Aragón a la brasa y, en 2011, Aragón sin empalmes. En ellos reelaboran los fueros de Aragón, redefinen palabras y expresiones locales, crean breves cuentos alrededor de la identidad aragonesa, etc. siempre desde un humor socarrón, absurdo y delirante.

En lo referente a novela, La mejor tarde de Goyo Letrinas (1995) refleja las andanzas de unos personajes derrotados por la vida que tratan de sobrevivir en un mundo que no entienden. Las estrellas no beben agua del grifo y Hola, soy Ángela y tengo un problema son dos novelas juveniles, una continuación de la otra, donde la protagonista, una estrella mejicana del pop, trata de encontrar sentido a su vida y para ello se mezcla con personajes de dudosa reputación, todo ello en un tono fresco y divertido. El artista (2015), una visión de la España del franquismo desde la óptica de un joven turolense aspirante a artista de cine, que sitúa la acción durante el rodaje del filme Viridiana, de Luis Buñuel, en 1961; y Un tango para Federico (2016), basada en el intrigante encuentro entre García Lorca y Carlos Gardel, en el Buenos Aires de 1933, son sus últimas publicaciones.

Apaga y vámonos, guía para la supervivencia, (Ediciones B, Barcelona, 1992), es el primer ensayo publicado en España sobre el mundo de la televisión privada y, a su vez, único ensayo de Joaquín Carbonell.

Acumula más de 14 títulos publicados en diversas editoriales, y numerosos artículos en revistas y publicaciones españolas. Algunos de ellos pueden leerse en la sección artículos.

  • Un tango para Federico (novela, 2017)
  • El artista (novela, 2015)
  • Querido Labordeta (ensayo sobre José Antonio Labordeta, 2012)
  • Pongamos que hablo de Joaquín (biografía de Joaquín Sabina, 2011)
  • Aragón sin empalmes (con Roberto Miranda, 2011)
  • Aragón a la brasa (con Roberto Miranda, 2010)
  • Gran Encicopledia de Aragón Preta (con R. Miranda, 2008)
  • Proyecto de Estatuto de Aragón plan B (con Roberto Miranda, 2007)
  • El Pastor de Andorra, 90 años de jota (biografía de José Iranzo, 2005)
  • Hola, soy Ángela y tengo un problema (novela juvenil, 2002)
  • Las estrellas no beben agua del grifo (novela juvenil, 2000)
  • La mejor tarde de Goyo Letrinas (novela, 1995)
  • Laderas de ternero (poemas, 1994)
  • Apaga y vámonos (la televisión: guía de supervivencia, 1992)
  • Misas separadas (poemas, 1987)